Los plásticos son materiales indispensables para la evolución de la humanidad, ya que han supuesto un ahorro importante en los costes de muchas industrias, constituyen un elemento fundamental en muchos bienes de consumo y han permitido importantes avances en campos como la medicina o la construcción.
Sin embargo, en los últimos años ha crecido la demanda de eliminar los residuos plásticos de forma eficiente, para conseguir modelos de negocio más circulares, por lo que todos los actores implicados deben tomar parte para comenzar a cambiar las cosas.
Es por ello que, además de seguir trabajando en procesos de innovación ambiental vinculados al plástico, se precisa intensificar las tareas de concienciación social respecto al buen uso de un material indispensable en el día a día, pero con serias consecuencias si no nos hacemos cargo de su correcta gestión una vez agotada su vida útil. La responsabilidad compartida se erige, en este sentido, en una prioridad y una obligación.
Afortunadamente, la tecnología ya permite hablar de materiales plásticos sostenibles, biodegradables, compostables, reciclados... debiendo evaluar cuál es la mejor opción para cada aplicación.
En este sentido, es muy positiva la Estrategia Europea de Plásticos al dar un enfoque circular a este material, promoviendo el uso eficiente de los recursos e impulsando prácticas y acciones protagonizadas por la reutilización y el reciclaje que contribuyen a minimizar el abandono de desechos en el medio.
Fuente: Ecoticias