El pistacho es un cultivo que está aún comenzando a caminar pero que, a juicio de sus más apasionados defensores, tiene buen futuro en el campo español. En los últimos años la superficie cultivado se ha incrementado rápidamente y las previsiones apuntan a que estos árboles continuarán ganando protagonismo en la agricultura española.
Félix Talegón es pionero en la comarca de Toro. Quince años atrás lo vio claro, y en 2003 puso las primeras plantas, que llevan ya tiempo en plena producción. Gestiona 20 hectáreas. “No hay otro cultivo más rentable”, asegura de manera tajante. “El almendro no le llega ni a la mitad”, añade.
Es cierto que no es para todas las zonas, pero se trata de un árbol muy duro, que lo soporta casi todo. Aunque resiste enfermedades, no le van bien las heladas de primavera ni el encharcado. Por lo demás no hay problema.
La pega es que aquí se desconoce casi todo lo que atañe al cultivo de este fruto, que tiene a Irán como principal país productor. Poco se sabe aquí de la poda, el riego y otros manejos de la planta. “No hay nadie que nos pueda asesorar. En Estados Unidos están a años luz”, asegura Talegón. La planta del pistacho puede dar entre 6 y 7 kilos cuando cumple once años.
La inversión media para poner en marcha una plantación de una hectárea va de 2.500 a 4.500 euros, según si el árbol está antes injertado o no. Poco más que no hiele en primavera es lo que necesita. No requiere mucha agua, aunque con ella es más productivo. Después no hacen falta grandes inversiones. “Para hacer la poda es necesario bastante menos que en el viñedo. En la recogida, una persona hace dos o tres hectáreas al día. Está todo muy mecanizado”, explica Félix Talegón.
La cosecha tiene buen mercado. La mayoría de quienes ahora lo plantan no son agricultores; gremio que es todavía un poco escéptico.
La calidad de los pistachos españoles es muy buena. El calibre es superior a la media en la misma variedad y más blanco. Esto implica que a la hora de comercializarlo está más cotizado. No saben los expertos el porqué, aunque creen que la insolación o las más horas de frío que soporta tienen algo que ver.
La elección de una variedad u otra es vital a la hora de la venta. Una buena opción para estos terrenos es poner hembras kerman y que sean polinizadas por machos de la variedad peter.
Fuente: Campo CyL