El aguacate es el cultivo de moda en Castellón. Pese a que la superficie conreada es aún poco importante en comparación con otra de las especies que se presentaron como alternativas a los cítricos como el caqui, lo cierto es que en los campos de la provincia ya se detecta un claro cambio de tendencia, pues mientras la superficie dedicada a este último fruto decrece, la del aguacate aumenta. El motivo es su buena adaptación, tanto en producción como en salida al mercado.
El responsable técnico de la Unió de Llauradors, Ferran Gregori, explica que este árbol de origen centroamericano es el tipo de cultivo "que más esperanzas genera en estos momentos entre los agricultores de Castellón", pues este año ya se ha demostrado que en la provincia hay profesionales del campo que optan por arrancar sus caquis ante la evidencia de que parte del producto no presenta calidad suficiente.
El presidente de Fepac Asaja, José Vicente Guinot, añade que entre los contras que han encontrado quienes optaron por el caqui también figura la falta de comercios especializados en Castellón, mientras en comarcas valencianas como la Ribera sí han florecido varias distribuidoras. "Esta cuestión es clave, porque aún en el caso de que el producto fuera de calidad, si no hay empresas que den salida en los mercados es muy difícil que los agricultores den el salto", sostiene.
Nuevas plantaciones
El aguacate presenta una óptima adaptación a las condiciones climatológicas de la Plana, como ha quedado patente en la comarca alicantina de la Marina Baixa, donde se inició el cultivo de este árbol que ahora llega a la provincia. En Castellón, las plantaciones más grandes se encuentran en Orpesa, Almenara y en la capital. Los últimos datos de la Conselleria de Agricultura corresponden a finales de la campaña 2016 y reportan apenas 18 hectáreas, pero en la Unió aseguran que durante los últimos dos años el nivel de crecimiento ha sido muy elevado.
Las numerosas charlas que la entidad agraria ha dado en diferentes municipios de la provincia en los últimos meses han sido muy concurridas, y en varios casos poco tiempo después se han materializado en la plantación de nuevas fincas.
Variedad Lamb Hass
Gregori informa de que, mientras en zonas de Alicante y Málaga se optó mayoritariamente por plantar la variedad Hass, en Castellón la apuesta es por la Lamb Hass por varios motivos, entre ellos sus niveles de producción, su aguante al viento y porque se cosecha más tarde que la anterior. "Con ello se pretende que tenga una mejor acogida en el mercado, pues la provincia llega dos años tarde a la producción de aguacates y hay mercados que ya están copados", asegura.
Con todo, Gregori y Guinot explican que, pese a ser interesante la entrada de nuevos cultivos, "el debate en Castellón ya no es el mismo de hace 15 años, cuando se buscaban opciones sustitutorias a la naranja debido a la gravedad de enfermedades como el minador". "Ahora se apuesta por complementos y la discusión clave pasa por una reconversión varietal que permita reorganizar la campaña citrícola para ganar en rentabilidad", zanjan.
Fuente: FreshPlaza